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EL DEPORTE DEBE DOPARSE

Somos los idiotas que, de pequeños, estando en clase de religión,
solo queríamos jugar en el recreo. Nuestro día favorito
era el día que había educación física

Prepararse!  Porque van a empezar a venir curvas en este blog (así que si te mola el contenido, suscríbete y debatamos!)
Vamos con todo y hasta el fondo! Vamos a hablar de doping, un tema candente que últimamente (los últimos 30 años ya…) está de moda. ¡A ver qué tal se da escribir hoy!

«Los del deporte», en 2024 somos salud. O mejor dicho, los centros deportivos y gimnasios, somos los verdaderos centros de salud. Somos los prescriptores de la mejora de la salud en todas las personas que confían en los profesionales que nos dedicamos a esto. Somos los que entretenemos, a través del leguaje corporal, a mucha gente que logra un resultado y un rendimiento mayor en sus objetivos tras pasar por nuestras manos. Somos la verdadera pastilla, pastillaca de la buena, porque ponemos solución siempre antes de que pase. Pero, por la cuenta que nos tiene, debemos empezar ya doparnos.


Somos los que atajamos al problema antes de que suceda, y evitamos males mayores de una sociedad enferma por el exceso de información y tiempo malgastado, que se dedica en parte a reclamar derechos sin ganárselos y que piensa que, por norma general, los hospitales están para usarlos como solución al problema básico, en lugar de pensar que llegar allí es un fracaso absoluto que hay que evitar.

Somos los que prevenimos, pero no se nos da valor

Somos los que ayudamos a prevenir las enfermedades. Preventivos… antes de…  evitando que pase… mitigando los riesgos de… Así somos, y si tienes algo en contra, dímelo y lo debatimos.

Somos esos que, en el cole, navegábamos dispersos en las otras clases porque no podíamos estar sentados en una silla quietos durante 5’. Los que andábamos castigados fuera en los pasillos para que el curso de la clase siguiera su “ritmo increíblemente entretenido” para los que teníamos inteligencia kinestésica.
Todos nosotros, somos los que te estamos prescribiendo salud sin parar todo el rato, pero no nos estamos drogando suficiente como para ser creíbles (más abajo lo dirá Dario de otra forma).

Pues seguimos siendo ninguneados por las instituciones, que nos fríen a impuestos en lugar de ver lo que les ahorramos poniendo de buen ver a los que irían más veces al hospital si no estuviéramos. Seguimos viendo como las clínicas de estética con sus operaciones milagrosas, facturan 10 veces más con la mitad de clientes porque es más cool (ojo, también ganan más que los que salvan vidas). Seguimos viviendo cada día, cómo nos viene la gente “rota”, porque en el cole era mejor sacar un 10, que aprender a sentarse recto en una silla o a tener hábitos de hidratación coherentes.
Seguimos padeciendo (esta que viene es por pringaos carentes de tiempo, culpa nuestra) cada vez que un influencer que no tiene ni idea, prescribe mal los ejercicios, pero gana unos cuantos miles de euros con menos esfuerzo que nosotros, porque a las marcas les hace tilín esto de ganar dinero por encima de “lo otro”. Seguimos ajustando nuestra propia salud y economía, para mejorar la de los demás, pero se nos trata como a los últimos en llegar, porque no damos repercusión ni retorno capital. Me atrevería a decir que no les venimos bien pa’cer más money a base de ibuprofenos y paracetamoles.

Somos adictos a dejar este mundo mucho mejor, a través de este idioma que es el deporte, pero nos vamos ahogando cada vez un poquito más. Por eso debemos empezar a ciclarnos más. Doparnos en conocimiento en la gestión, meternos un buen chute de líneas de lectura sobre cómo generar más y mejor volumen de negocio. No nos vendría nada mal un par de pinchacitos de hormonas sobre el leguaje gestor y administrativo. Y por supuesto, que no nos falte el entrar a algún baño con una tarjeta (procuremos que no sea de crédito por si se nos va la mano), por si nos encontramos a algún político, a ver si inspiramos algo de aprendizaje en el poner buena cara y prometer cosas que nunca van a llegar.

Este es el problema de no haber atendido en clase de mates pensando en el recreo. Un problema, que tiene como consecuencia que los demás, esos a los que no hemos involucrado o nos ven como una amenaza, siguen viendonos como niños jugando en el recreo. Somos los idiotas de la clase y los últimos en llegar a la de economía.

Lo malo y lo bueno, que somos muchos… Y no hay nada en el mundo que pueda parar a un ejercito preparado. Hace 20 años, éramos los raritos, ahora, solo somos malos gestores. Ya nos oireis cuando estemos hasta arriba de testosterona, pero bien formados, porque talento, tenemos un rato. Además, en 5 años, seremos más, muchos más.

Os voy a dejar el vídeo de Dario, que nos cuenta de otra forma y con mucho más estilo, porque ir a un hospital es un fracaso que se debería evitar,
Coherencia de un tipo que sabe mucho de todo esto, lo que ganaríamos si le hicieramos más caso…

https://www.youtube.com/watch?v=Q3o0mJ5pKHc&ab_channel=TaronjaGames

Las mil y una excusas de m*erd* para escaquearte en el entrenamiento

Dime de qué te quejas, y háztelo mirar

No si estarás de acuerdo conmigo, que nuestro día a día está plagado de exceso de estímulos. La velocidad a la que van nuestras cabezas recibiendo información desmesurada cada vez que desbloqueamos el celular, la forma en que parece que el tiempo se agote con una sensación de “no haber hecho nada de lo que se tenía en agenda”, o el ver algo en la tele contestando al whatssapp mientras miramos instagram…
Las vidas perfectas de la mayoría de personas que observamos en el mundo de ensueño y fantasía llamado redes, versus la tristeza y la retahíla de malas noticias que todo el rato se empeñan en dar las noticias de prensa y tv, remarcando el interés que “parecen” tener los políticos en que nos enemistemos con el vecino, con nuestra prima o con el espíritu santo, son el pan nuestro de cada día.

No sé si estarás de acuerdo conmigo, pero creo que nos pasamos más tiempo comparándonos con los demás, con el “pues yo más” o “yo no tengo tanta suerte cómo”, que viviendo a tope nuestra vida con los 7 sentidos (si, el de súper héroe y el de la curiosidad también) puestos en vivir.

Mientras nos sumergimos en nuestro propio debate, se nos pasa la vida. Debatimos con nosotros mismos y nos convencemos que, todas las excusas y justificaciones que nos ponemos para no hacer cosas por y para nosotros, son cien por ciento potentes para crear una cultura del dejar las cosas para mañana o para que las hagan otros.
Creo que hemos interiorizado tanto el discurso, que hemos puesto de moda y a la vez desvalorizado lo de, la vida hay que vivirla a tope ¡porque es corta!
¡Estoy totalmente de acuerdo con la frase! Peeero, el problema viene cuando la  gente, pese a tener la plena libertad de poder elegir el camino que más le guste y con todos los recursos al alcance, no sabe cómo vivirla porque no se pregunta lo suficiente qué quiere hacer para vivirla.Hay muchas personas que pueden sentirse así. Centrados más en el tener, que en el ser y el hacer.

Creo que para compensar la balanza, hay otras que hacen que la vida cobre sentido. Motivadores natos que han encontrado su propósito, personas involucradas con una misión que nos muestran el camino cuando estamos más perdidos. Gente que, pone todo lo que está en su mano y que muchas veces se frustra por no encontrar una forma mejor de hacer bien lo que ya hacen bien. Personas que, sacan el mejor partido de otras que necesitan más.

El fin de semana pasado, hemos tenido la suerte de vivir algo que espero sea el primer paso de los muchos que demos en Taronja Games. Hemos tenido el privilegio de conocer a personas que se encasillan perfectamente en el grupo del párrafo anterior. Motivadores incansables creando ilusión con cada paso que dan. Súper humanos, capaces de revolucionar con su ejemplo y saber estar el entorno por donde pasan

Lo que vivimos en la tarde del sábado, fue una mezcla de emoción y saber hacer de estos motivadores que compitieron en la nueva categoría, Adap.tg creada para fomentar la inclusión dentro del deporte. Sin géneros, sin edad, solo parejas de súper personas. Un/a integrante con algún tipo de etiqueta basada o la limitación (funcional, neurológica o patología), la otra persona integrante de la dupla, etiquetada como persona convencional, compitiendo por parejas. El reto, los dos integrantes dentro del mismo ranking, con el objetivo de demostrar que de esta primera parada a nuestra fase final de julio, todos y cada uno de los competidores van a mejores sus habilidades, tanto físicas a través de la funcionalidad y el rendimiento (cardiovascular, de fuerza, equilibrio, etc) como psíquicas, basadas en el sentimiento de comunidad y colectivo trabajando al unísono.

Esto es lo bonito en mi opinión de Crossfit, que nos da un lienzo en blanco para poder seguir usando sus bondades basadas en rendimiento eficiente.
¿Por qué no crear una disciplina con todo lo que hacen bien tanto este deporte como organizaciones como la de Valientes? Al final, depende de nosotros que sigamos haciendo lo posible por dejar esto mejor de lo que lo encontramos.

Aquí os dejo un reel de su entrega de premios. Si tuviera que pediros algo, es que os animéis a encontrar más súper héroes a los que podamos ayudar a través de esto. EN mi deseo, también está algo que también sucedió el sábado. El de no poner ninguna excusa ni justificación para dejarse todo en cada prueba. Creo sinceramente, que estos chicos de adap.tg, fueron los verdaderos motivadores para que los demás echásemos el resto aquel día.

Crossfit debe ir de capitalistas despiadados

… y no de gentes” funcionariadas”

-¡Debes ganar mucha pasta! ¡Es que a vosotros os va súper bien!¡Lleváis un ritmo increíble, pero podéis dejar un poco para los demás!

Ojo, se viene chapa, solo acta para ratos libres o tiempo de estar sentados en el wc… ¡Avisados quedaís! Que así mi amiga Amparo ya no me echa la bronca por la turra del texto.

No son frases sacadas de un libro. Os prometo que son frases que nos han dicho personalmente dentro de la agencia y en especial dentro de los negocios crossfiteros.
Entiendo que, pese a reconocer constantemente la cantidad de errores que seguimos cometiendo cada día por aprender a este juego de ser empresarios deportivos, haya personas que puedan interpretar desde su punto de vista que algo estamos haciendo bien, pero os garantizo que desde nuestra mirada crítica, con mucha visión túnel la mayoría de las veces, no tenemos ni idea durante muchas veces al día de lo cómo leches se hacen las cosas.

Pero este no es el asunto que me atañe hoy. El tema es de rabiosa actualidad. No me refiero a Shakira ni a Casio…


Me refiero al contexto creado por el transfondo que hay en las exclamaciones citadas en el primer párrafo y, por supuesto, al comentario que sinceramente y con todos mis respetos (por no abrir un melón de desprecio que no sume), no puedo compartir. Lo único que diré es que, si fuera capaz de acercarme al menos un mínimo porcentaje a la visión que tiene Juan Roig, me encantaría llegar a convertirme en un capitalista despiadado dentro del mundo del crossfit.

Motivos: muy sencillos. Hagamos un símil de Mercadona  a nuestro sector

  • Imaginad lo que sería llegar a tener  1600 (Meracadona ya supera esa cifra) boxes y haber empezado por uno… Llamadme loco, pero estoy seguro que alguno soñaría con tener 10 boxes. Esto, de momento, solo lo ha hecho una marca. ¿Cuál? Crossfit. Tanto el súper mercado como la marca de centros, han encontrado su hueco en el sector y han mejorado los procesos de este, revolucionando a su competencia con argumentos de peso.
  • El cliente, por encima de todo. Mercadona lo tiene claro con su estrategia de SPB (siempre precios bajos) sin olvidar la calidad. Crossfit, ha encontrado que lo mejor de todo es cuidar de la salud de sus usuarios creando comunidades. Aquí hay una nota diferencial. En mi opinión, por su juventud, crossfit aún está aprendiendo cómo cuidar a un eslabón importantísimo de la cadena. Sus afiliados. El índice de rotación en Mercadona de sus empleados es 32 puntos más bajo que la media de super mercados en Europa. Esto hace que sean estudiados en todo el mundo. La diferencia es que crossfit hace pagar a sus primeros clientes por la marca, y por desgracia cuando se está empezando a girar una rueda, se va aprendiendo en el ensayo error. Aquí es donde se podría mejorar.
    Pero, como ocurre en Mercadona, donde pese a tener ese tipo de personas despiadadas, la gente acude a comprar sin que le apunte nadie con un arma, la marca crossfit es algo que puedes elegir comprar o no.
  • El box, es un súper mercado de servicios de la salud. O al menos, yo así lo veo. Cada centro tiene sus características para prescribir que las personas mejoren sus hábitos. Crossfit, tiene un sistema hilado para que cada coach pueda elegir dicha base, y aportar el mayor posible para que los alumnos y atletas se lleven lo mejor de sí mismos. Por muchos boxes que haya, no creo que ninguno nazca con la intención de hacer daño. Todo lo contrario. ¿Os imagináis que un empresario de alimentación pensase sólo en lucrarse a costa de envenenar el interior de las personas? Para eso está ya Telecinco… 😉
  • Los proveedores, amigos con los que tomarte “un café con elásticas”. Me encanta esta relación. Con lo de elásticas, me refiero a que una relación con un proveedor, debe de ser tensa pero flexible. Si es que quieres que dure. Todos queremos ganar. O mejor dicho, unos quieren ganar más y otros quieren gastar menos. En caso del crossfit, pueden gastar menos. Esto es una realidad de los mercados, de todos. Pero en deporte, debe ser que el ego no nos deja ver que esta gente (los proveedores) también come. En nuestro caso, considero que nos llevamos bastante bien con ellos, porque nos gusta considerarlos compañeros de camino.
    Aquí Mercadona, por mucho que digan que aprieta, es ejemplar y algo que deberíamos de estudiar más en el deporte. Esto es algo que nos lleva al siguiente punto.
  • El capital. En deporte, aún no existe. Mejor dicho, ganar dinero como lo hacen las grandes compañías de otros sectores, solo lo logran muy pocos negocios deportivos, comparado con la cantidad de profesionales que estamos dando servicios a un mercado con un TAM de más de 2000 millones de personas. Pero debemos inventarlo y sobre todo intentar eliminar la creencia de que la pasión no puede ser rentable.

Esto es un error de base que podemos corregir. ¿Cómo? Como Juán Roig o Crossfit han hecho. Reinventando, re imaginando, encontrando caminos que mejoren la eficiencia de los procesos y, sobre todo, dejando esto mejor de cómo lo encontraron.

Doy fe de la pasión que sentimos los emprendedores del sector, pero, cómo monetizar, cómo atraer, cómo fidelizar o, cómo gestionar mejor para hacer crecer nuestros negocios y así generar riqueza, como lo hacen “el súper y la marca”, debe ser imperativo en nuestros estudios y aprendizajes.
En el mundo del crossfit, la mayoría de las personas que dirigen un box, se dedican por autoempleo. Esto es romántico a más no poder, y efectivo también, si no, sería inviable que se abriesen cada vez más negocios de estos,  pero el problema reside en que suele darse la casuística de una falta de formación en empresa y en gestión.
Aquí viene la oportunidad de cambiar las reglas, no solo del sector, del deporte en el mundo.

Nos la está dando este deporte.
Sigamos buscando el camino de este tipo de capitalismo despiadado y no el de currar lo justo para criticar el curro del otro sin saber cuánto se lo ha currado esa persona…
Solo así podremos mostrar que si ganamos «mucha» pasta, debe ser un orgullo y un ejemplo para los demás, y no un motivo de comparativa absurda

El crossfit es para nenazas 

El no prevenir puede hacer que llegue el vacío y nos explote en la cara.
¿Os acordáis de la red social Tuenti? 

Hoy vamos a hablar de conclusiones venidas de reflexiones de llevar ya más de, no me acuerdo ni los años dentro ya del sector crossfitero.

“Este deporte engancha, es la droga más sana que he encontrado, nunca he disfrutado tanto con un deporte, me ha cambiado la vida”. ¿Cuántas veces hemos escuchado estas frases dentro de los boxes, cuántas las hemos dicho nosotros mismos? Y ¿Cuántas más las escucharemos? 

Son 4, me flipa escribir esto. Reitero, son 4 las veces que esta semana (espero no recibir ningún feedback más esta week, porque hoy es sábado morning), he recibido comentarios que, no di mucha importancia cuando la primera persona soltó. Que llamó mi atención la segunda y, ya la tercera, me explotó la cabeza. El tema es que estas personas eran de poblaciones diferentes y no tienen que ver unas con otras, pero el comentario era igual. El único nexo de conexión que encontré al preguntarles, es que los 3 tienen hijos de entre 12 y 18 años. 

Su frase conjunta viene a ser así: “en el grupito de mis hijos, dicen que el crossfit es una cosa para nenazas y homosexuales” 

¿Os imagináis mi cara la tercera vez? Y ya no os comento la cuarta, cuando el comentario venía de una de las hijas de mi amiga, que denotaba preocupación por parte de la madre, por si a su hija le iba a afectar en sus relaciones. Tengo que reconocer que aún estoy un poco en shock, y que el ego me lleva de primeras a pensar que son niños que no han hecho deporte en su vida  y que no tienen ni idea de lo que hablan.

Pero, en otro contexto, ¡vaya ostia emocional me ha dado recibir la t noticia!

Abro en mi cabeza la veda de las pajas mentales buscando sentido a todo, e intento reforzar mis pensamientos preguntando de vuelta a los 4 adultos que me han comentado esto, cuál es su opinión de por qué hay ese pensamiento en el grupo de sus hijos, ya que se me hace imposible pensar que son críos mal educados, pues sus padres son gente 10, así que descarto esto. 

Recojo las respuestas que me dan y, tras darle media vuelta, me salen estos motivos de dicho desagrado de las nuevas generaciones: 

  • Son más sanas que las anteriores a nivel general, pero también piden calle. Ir a un sitio caro para ellos les pone a la defensiva. No olvidemos que lo boxes estamos en precio casi en la escala de fitness boutique y que los adolescentes deben gestionar dónde gastarse sus pagas. Está claro que el parque con barras, da más margen en la cuenta final de gastos.
  • La “desnudez” de los boxes, intimida. Por mucho que sea molón y forme parte de nuestro deporte, ¿en quién se fija la persona insegura entrar? Juraría que, los adolescentes deben pelear aún más contra sus miedos. Al igual que esos nuevos usuarios (adultos) que entran por primera vez a un box porque alguien les ha hablado de esto. Lo que para nosotros, los crossfiters, está totalmente normalizado, para una persona que acaba de llegar, puede ser un motivo de agravio comparativo de alguien que no hace deporte, disparando aún más su inseguridad.
  • ¿Qué me gane una chica? Ya lo dijo Fikowsky cuando Brigs le adelantó cuál cohete. A los tíos, esto nos toca la moral.
    Me pongo en el contexto de, “soy de los que molo del tuto, paso de mostrar que soy inferior” ¿Os imagináis lo de debe ser para el ego del más mola de la clase? Es mejor activar una campaña anti…
  • El crossfit mola, pero no debe ser de buen agrado que a la edad de más ego de nuestras vidas, conforme llegas a probar “te tocan la cara” mostrándote que hay más cosas que no sabes hacer de las que controlas. A un adulto hecho y derecho, le sirve de motivación, pero a los chavales… no sé yo.
  • Puede que haya una parte de chicos y chicas que en los institutos no son los wachis y probablemente sufran algo de bulling.
    Al reflexionar sobre el motivo en cuestión, visualizo que muchos de los boxes amigos que veo y frecuento, tienen unos cuantos chicos de perfiles similares. Creo que el box es un lugar donde se sienten seguros, ya que es un sitio donde se les respeta y van agusto. Esto hace que los malotes se pongan a la defensiva porque son los “inseguros los que van”. Encima, pasa algo mágico. Y es que a los meses, estos “apartados” cambian la inseguridad por confianza y pasan de ser “normales” a un cambio físico visible.
    Los malotes, cada vez más pequeños…  

Muchas veces pienso muy fuerte que ojalá el crossfit me hubiera llegado con 11 años. ¡Me hubiera encantado! 

Eso sí, también creo con confianza ciega que si mi grupo de amigos y yo tuviéramos ahora 15 años, seríamos los que estaríamos haciendo calistenia en el parque con el litro de cerveza y el altavoz portátil, escuchando trap. Y es que nuestras circunstancias y condiciones sociales, casi nos forzaban a eso en nuestra época. Por muy deportista que seas, si vives en según qué entornos donde la pasta brilla por su ausencia, esto pasa.

No sé cómo será de grande el melón que estoy abriendo, pero creo que es un buen debate que en mi caso nunca había puesto en la mesa. El de intentar averiguar por qué no estamos llegando más a los adolescentes.

Sinceramente, creo que una forma fácil de proceder es esperar y que los chicos cambien de opinión, pero no hemos venido a esto. 

Creo que no estamos cuidando a estas generaciones lo que podríamos, más bien deberíamos, porque en cierto modo, nos sentimos cómodos con que los nuestros, los de nuestra generación, nos adulen y nos digan lo que mola esto. Creo que, salvo en ciertos boxes donde, o la persona es especialista en psicología de adolescentes o hay un grupo de chicos que se han unido y van como cualquier grupo que va a fútbol o rítmica, muchos estamos intentando responder cómo llegar mejor a tener la rama de teens. La mayoría de los teens, están creando la misma sensación de, eso es para los padres, que tuvo una generación entera con Facebook cuando salió la red social Tuenti.

En unos cuantos podcast ya he comentado mi opinión sobre la adolescencia del crossfit y el deber que tenemos de cuidarla. 

Este suceso, añadido a las conversaciones que muchos profesionales tuvimos en Madrid Championship me han hecho cambiar dicha opinión. El crossfit ya no es un adolescente a secas. Crossfit ya ha vuelto, como todos, a cumplir años y ahora es un universitario que hay que seguir haciendo que entienda que estamos aquí a su servicio para ayudarle a encontrar su camino. Debemos seguir pensando cómo atraer a ese no cliente, sean los chicos que nos desprecian, o sean los que aún nos ven como locos giraruedas. Aún son la gran mayoría, no nos equivoquemos con visión túnel ¡Hay mercado!”

Pienso que esto, en un mercado con edad de universitario, es una pasada. Es poder compartir con un interés conjunto, es juntar jugadores, es contrastar usando cada uno sus armas. 

Sin envidias, con compañerismo, pensando en cómo te puedo ayudar a que subamos juntos el nivel. Sin dar pie al “si ellos lo hacen, nosotros también” y cambiarlo (sin que suene a escena sexual, ni gay ni de nenazas) por un “¿y si lo hacemos juntos más grande?”

Llamadme loco, pero sigo pensando que crossfit es la oportunidad más poderosa del mundo que un DEPORTE tiene de hacer las cosas bien. Viendo los números de crecimiento de España y de países vecinos, sigamos educándolo, aunque, como con todo adolescente, a veces duela.

Y ¿si «Beneitizamos» España?

La generación ¿Blanda?
De la saga “Nadalizar” España, viene la segunda parte con:
“Beneiticemos” a la sociedad española

Lo que hemos vivido este pasado fin de semana, es solo el brote de una hojita, que está saliendo de una semilla plantada hace más de 10 años. Y no me refiero a la peli de Marte, que tiene como protagonista a Mat Damon y, que pusieron en la tele pública el pasado viernes. 

Me refiero a Don Fabián Beneito Selles, que aparte de ser ya un amigo encontrado en el camino del deporte y, el atleta nº 1 del crossfit español, es, como muchos otros deportistas que nos representan, un ser de luz que ha sabido reinventarse cada vez que la bombilla parecía apagársele. O mejor dicho, cada vez que en nuestra querida España se le ha intentado tirar por tierra por cometer un solo error, porque al chaval le han dado por todos los lados. Pero no entraremos aquí en este sarao, porque este post, hoy va de otra cosa. Aunque dicho sea de paso,  es que si algo bueno tenemos, es meternos con lo que hace el vecino en lugar de mirarnos el ombligo.

Podium chicos Dubai Fitness Championship 2022

Este texto, quiere poner en contexto lo que hoy día, un chico como él,  tiene que pelear para lograr algo de reconocimiento en España. No quiero quitar relevancia a las cosas que suceden al resto de países, pero como suele decir aquel, que cada palo aguante su vela. En este caso, hablo solo de lo que sé, o de lo que creo que sé… 

Fabi, y una retahíla de jóvenes deportistas de élite como él de este país, llevan en su mochila “demasiadas” cosas para rendir en la élite mundial, pero han hecho todo lo que está en su mano para estar donde están. Por eso está ahí, pese a cómo está hecho el sistema del deporte español, en muchas disciplinas casos obsoleto, en otras, como es el caso del crossfit, aún por educar.

Fabi es número uno hace ya años en el ranking del crossfit nacional. Deportista no nativo (la mayoría de los deportistas de élite de crossfit vienen aún de otros deportes), sus primeros pasos fueron en el motocross. A su corta edad, ya está hecho un autentico padrazo de un niño que es su motor y, que apuesto seguirá algún paso que otro de los que ha dado su padre. Fabi es, sobre todo, un currante nato que puso en el mapa crossfitero a la población de Alzira (Valencia),  junto con su socio Cuti. 

Un tipo que tuvo que ponerse una cama en su box durante la pandemia para poder preparar sus opciones de ir a los crossfit games (tampoco entraremos en las facilidades que le pusieron para ello, pero es de traca y da para otro post entero). Un tipo, que ha reparado su cuerpo a base de entrenar como un animal cada vez que le ha salido una nueva tecla. Este chico humilde de pueblo, hizo una caja de 61000 euros ganando este fin de semana la Dubai Fitness Championship, una de las competiciones más importantes del mundo en el sector. Mucho diréis, ¡menudo pastizal! Pues si que lo es, pero este premio se queda bastante corto con todo lo que ha apostado e invertido para llegar hasta allí. Y no hablo solo de pasta…
Debemos mencionar también, aparte de Fabi que era su tercera participación, este año 2022, hemos gozado con la presencia de 6 españoles en Dubai, convirtiendo a España en uno de los países con más representación.
Desde mi punto de vista, todos ellos igual de currantes. Oihana, Valentina, Javi, Aniol y Dami, han logrado tenernos a muchos enganchados a los aparatos electrónicos. En mi caso particular, les agradezco de todo corazón el show y, otra cosa muy importate. Al disfrutar del evento en diferido y para no ver spoilers, el hecho de solo ver el móvil o la pantalla únicamente para verles a ellos. ¡Menuda desintoxicación de multi información!

Fabi lo ha hecho, ha ganado el título de Fittest contra atletas del más alto nivel mundial. Y si me permitís contarlo a mi manera, lo ha ganado con una esencia al más puro estilo español, remontando desde atrás, con un inicio que le dejó en los últimos puestos el primer día, y con un final de infarto donde un fallo del rival Canadiense Brent Fikowski, hizo que Fabi le adelantase literalmente en el último paso y ganase por nivel de fitness (el que más veces queda delante en las pruebas) también al conocido Moritz Fiebig

En España, creo que no sabemos, o nos cuesta un cerro ganar, si no es con esta emoción. 
Y es que en España, ¡somos así!  Si no es con micro infartos, no vale. Creo que Fabi es una analogía y claro ejemplo de la evolución del deporte, donde «los Fabis», son los que llenan de éxito las disciplinas. Creo que estos “nuevos Nadales” que deben ser el relevo generacional. 

Conste en acta que me he perdido pocos partidos de Nadal, que lo nombro como ejemplo de lo que debemos ser cada vez que doy una charla y, que es muchos de mis días malos, el espejo en el que me miro para poder salir adelante. Déjenme decir, que al talento de Nadal, se le añadió “la suerte” de estar dentro de un círculo de talento y contexto que, si hacemos un agravio comparativo, nada que ver con los recursos con los que cuenta un deportista de disciplinas minoritarias en sus inicios. 

Fabi es un currante nato, con una vida sencilla, pero para nada fácil. Tiene un talento increíble, que se ha encargado de ir modulando a través de tomar decisiones que eran de alto riesgo (o así lo verán la mayoría de los chicos de su edad, donde priorizar sobre una cosa y no dispersarse, está jodido), que han ido condicionando a fuego lento su rendimiento hasta encontrar cada día su mejor versión. Este chico, no ha parado de crecer desde que encontró el deporte que ahora domina. 

Pero entremos en materia. ¿Cómo lo ha hecho? 

Querer ser el nº 1, no es lo mismo que serlo. En mi opinión, Fabi ha puesto todo lo que alguien con recursos finitos, debe poner para llegar donde ahora está. 

Obvio que para serlo hay que querer, pero pocos están dispuestos a pagar todos los peajes que hacen falta para subir y sobre todo, aguantar dando el callo durante años, peleando y aprendiendo a navegar de tormenta en tormenta, hasta que llega una buena noticia. 

Aquí pongo las claves que, desde mi punto de vista, han hecho grande a Fabi: 

  • Foco 200 %. Es un “martillo pilón en lo que hay que hacer. Hasta el día de descanso, se descansa a máxima intensidad. 
  • Ir “palante” siempre. Dispuesto a asumir todos los cambios que hagan falta para estar en el entorno ideal y apostar todo lo que tiene por cumplir su sueño.
  • Priorizar el entreno a todo lo demás. No quiero pensar la de veces que estos deportistas tienen que decir que no y renunciar a ser “personas normales” y los comentarios que tienen que soportar y superar por ser monotemáticos
  • Corregir errores constantemente. La obsesión con la mejora continua se hace eco en su disciplina. La presión que da esto, hace que el espíritu crítico y perfeccionista toque hasta cuando uno gana.
  • Valoración del camino y no del éxito. Si fuera al contario, cosa que parece molar cada vez más, España no sería una fábrica de campeones.
  • Aprender en la derrota, sobre todo a saber perder. Su esencia no es ganar, es ser un ganador. Para esto, si no has pasado por miles de fallos o malas experiencias y no sabes relatiizarlas, puedes ser un gran segundo, pero no el mejor.

Sobre el papel, los Fabis ya están casi con entornos perfectos para su rendimiento, pero… ¿Qué sucede con las cosas que no dependen directamente del deportista?
Creo que la mayoría de los deportistas de élite españoles, se encuentran estos días con situaciones críticas. Empiezan a escasear los recursos. Empiezan a dar (una vez más cuando se vienen crisis) un paso atrás los posibles sponsors y muchos de sus entornos construidos, no pueden invertir el tiempo que antes ponían en cuidar al talento. Una rueda difícil de cambiar, salvo en nichos pequeños que están ya experimentados en serpentear esto. 

Un país que no para de hacer caso al miedo, cuya sociedad sigue algo aletargada por tener pocos alicientes y puntos de apoyo, unos políticos ya en campaña, una inflación que ralentiza hasta al más rápido y con más recursos…
Todo esto, son cosas que no dependen del deportista, pero que una tras otra, se suman, por pequeñas que parezcan, como kilos a sus mochilas, que por suerte o por desgracia, están llenas de casuísticas que no “ayudan” a crear dichos entornos por activos como el de Nadal.

Es por esta gran mayoría de deportistas que están dando el callo con un plus de carga innecesaria en sus mochilas, por las que deberían, deberíamos, todos como sociedad apostar. Solo así subiremos el nivel. Mientras sigamos poniendo noticias en la sección de deportes solo de los nadales, no creceremos como colectivo.

A día de hoy, creo que en España son muchos más los deportistas que lo siguen teniendo difícil para estar a la altura de lo que exigimos, que los que se encuentran en un entorno ideal y de quid pro cuo  a la altura de sus rivales. Por mucho que nos queramos parecer y por mucho que me duela lo que voy a decir, los deportistas de alto nivel a los que se enfrentan nuestros chios y chicas,  gozan de entornos mucho más profesionales y eficientes que cuidan más de que la corta vida del deportista esté protegida. 

Por mucho que Nadal nos esté marcando el camino, creo que tenemos una misión muy concreta. Toni Nadal, su tío, hizo un comentario de la diferencia que hay entre su sobrino, Federer y Djokovic y el resto de jugadores jóvenes del circuito atp. Era que estos tres leyendas, habían desarrollado la capacidad de sufrir. Totalmente de acuerdo si hablamos de tenis. Pero si hablamos de otros deportes de minorías, creo que es justos que a “los Fabis”, les metamos en el mismo saco que a los tres astros. Pues dentro una generación blanda (que supongo que son los abuelos cebolletas del deporte como yo los que les llamamos así, por ego o por miedo a que nos adelanten por cualquier lado), hay unos muchachos peleando con todo y a pesar de todo, rompiendo las normas de la gente de su edad y dando el callo internacionalmente. Creo que aparte de clara, es bonita la misión de promover y ayudar a este grupo de talentosos que están llenando pistas, canchas, tapices y boxes de toda España. Son ellos los que, junto con sus entrenadores, pero también sus profesores de colegios, médicos, sanitarios y todos los que nos defienden cada día y sienten que su idioma es mejorar, a los que hay que aportarles y poner en valor.

Ayudarles a mejorar. Mejorar ellos, mejorar lo que hacen, para mejorar la sociedad.

Estos chicos forman parte de una generación de fueras de serie que están soportando cada vez más presión social por tener que hacerlo todo bien, pero con cada vez recursos más finitos. 

Tenemos dos opciones. Sí, solo dos. O pensar que son una generación blanda y que no salen del conformismo y de una apatía permanente por no querer cometer fallos, o tener miedo a cometerlos. O pensar que somos culpables de su evolución, y que como toda generación, hay de todo. Y el que sale bueno, es buenísimo por todo esto.
Beneitizar España es una forma de hablar, pero tengo claro que si cogemos como referente y ejemplo a este perfil en lugar de pensar que serán una generación perdida, el número de campeones, subirá. Y espero que me hayáis entendido con lo de campeones, que no de medallas vive el ser humano…

Os dejo un documental que grabamos ya hace unos años en taronja games,  donde Fabi es protagonista y ya veíamos cómo tenía el ojo apuntando donde está a día de hoy.  Por cierto, del vídeo, no recordaba que menciono  su futuro.
¿Os imagináis que desde nuestros pequeños universos apretásemos con ellos para que lo tengan más fácil en conseguir sus sueños? ¿Creéis que tiene sentido  que los pongamos como referentes de cómo “salvar” a la sociedad? Yo si…

Documental 4ª edición de Taronja Games

Ante la incertidumbre… Crossfit. No al cierre

Cómo hacer caso a un adolescente,
cuando le están echando la culpa del problema

Pandemia… Miedo… No salgas, no hagas, no vayas, no te acerques, brote, rebrote, cierres, dolor. ¡Vale ya! ¿no!?
O mejor, ¿qué tal si nos vamos al otro lado de las noticias? No sé cuántas habrá, pero yo al menos conozco una comunidad, que está peleando con fuerza llevar un poco la contraria.  Como dice la cabecera de la serie de La Valla, los derechos se conquistan. Esta disciplina, los está conquistando.

Vamos primero de todo a poner en contexto, a todas aquellas personas, por suerte cada vez menos, que no les suena la palabra Crossfit. Digamos que es un nuevo deporte (la palabra Crossfit es una patente. Un monstruo digno de ser mencionado y estudiado en cualquier escuela de negocios, como una empresa que ha creado unas barreras de entrada de mega corporación desde sus inicios. El nombre del deporte, podemos denominarlo como funcional fitness) que ha surgido en EEUU hace apenas 15 años, de una necesidad encontrada en el mundo del fitness. Aunque la disciplina se define exactamente como ejercicios funcionales constantemente variados, ejecutados a alta intensidad, este deporte coge su esencia en unos básicos de movimiento que todo ser humano debe tener, como son sentarse y levantarse, poder con pesos por encima de la cabeza, o saber manejar el cuerpo y el peso de este de forma dinámica.


La verdad que, entre obesidad y sedentarismo, este deporte de deportes que ayuda a superarse a uno mismo cada día en 10 variables diferentes, es un soplo de aire fresco en una sociedad que parece vivir entre más sombras que luces.

Foto Adolfo Ruíz, evento Taronja games 2020, Atleta Stefano Carosso ganador RX


Tal vez parezca un deporte donde estar fuerte es una obligación y, que lo que se ve en las noticias de él, las pocas que salen de momento, es una mezcla de cuerpos esculturales y esfuerzo extremo que pone a personas al límite. Por algo se empieza, estoy seguro que lo bueno estar por venir para esta disciplina que ha vivido una pandemia de muchos cambios dentro su infraestructura, pero de esto hablaremos luego entre líneas. Afortunados somos desde nuestra organización, que Taronja Games tuvo su hueco en las noticias de antena 3 y la 1 por ser los primeros en hacer una competición de evento no profesional tras el covid, pese a no ser una competición sancionada y asumir los riesgos de abrir un camino dentro de los eventos

En una sociedad cada vez más cabreada y dividida, hay algunos detalles dentro de este deporte, que creo podrían servir de punto de referencia para salir un poco de este atolladero en el que andamos metidos como sociedad en global que ya somos.
Voy con unos cuantos que he podido aprender tras estos games:

  • Líderes honestos: ojo, que este primer punto puede traer mucho debate, pero me voy a centrar en la segunda parte de lo sucedido, por eso lo defino como honestos. Y es que el creador de la disciplina Greg Glassman, cometió unos cuantos fallos seguidos, bastante graves desde mi punto de vista, que hicieron que casi toda la comunidad del fitness se hiciera eco de la noticia y que muchos de sus fieles planteasen un cambio de rumbo, haciendo que la empresa dejase de ingresar números suculentos. Ante esta situación, el CEO asume su error y dimite del cargo pasados unos pocos días de la polémica.
    Lección simple que podrían aprendermuchos de nuestros líderes. Si fallas, asume. No pueden rodar cabezas de gente si es el de arriba el que ha cometido el fallo. Ojalá muchos se aplicasen el cuento. Mejor nos iría
  • Orgullo de pertenencia: los Games (juegos anuales que hace la compañía) han asumido un rol muy importante dentro del movimiento. Esto lo han logrado estableciendo una serie de pruebas abiertas a toda su comunidad, para establecer cual es el fittest. Así, mientras cada usuario va encontrando una serie de mejoras físicas y psíquicas en la práctica, el evento propone que se midan en un reto con ranking mundial, para que puedan ver su nivel, año tras año en su categoría. Se puede decir que como cualquier deporte o competencia, pero, desde mi visión, lo que el crossfit está logrando es enganchar a gente de cualquier nivel, y eso lo consigue porque desde su inicio, ha creado “sus propios modales”, que no son otra cosa que ser respetuoso con todo lo que está dentro del entorno. La diferencia entre entrar en un box y acudir a cualquier instalación, es que todo el usuario mimetiza las normas de conducta impuestas desde la disciplina. Cual arte marcial, el respeto por la puntualidad, por recoger cada uno lo que ha removido y por empoderar al compañero, hace recordar al Kaizen, pero con un ligero toque de occidentalización.
    Lección perfecta para tener claro que la sociedad puede estar bien educada con unos leves y básicos principios desde que entran por primera vez en un sitio nuevo. Poca innovación y más sentido común.
  • Dos campeones ejemplares: Toomey y Fraser, ella y el, dos monstruos que sobresalen por encima del resto de sus rivales y que están haciendo que el deporte haga “el ruido” suficiente para que empiece a ser novedad. Para mí, no es lo capacitados que están físicamente lo más importante. Tampoco es su superioridad ante sus rivales. En mi opinión, lo más importante que han hecho estos dos súper héroes, es tal y como explicó perfectamente Martín Montequín en la retransmisión de los games en español (minuto 33 por si no lo quieres ver entero).
    Lección, el contexto está por encima de todo y  hay que aprovecharse de ello, unificar fuerzas y crear entornos proactivos para seguir mejorando. Por muy bien que parezca vaya todo, siempre hay algo que se puede mejorar. Iría mejor la cosa si nos centramos en esto ¿no?
Casters, Albert y Medy en evento 9 de los pasados CF Games. Colaboradores Valentina y Martin
  • Navegantes en la incertidumbre: este deporte, en competición, es en si mismo un símil a lo que está pasando estos días. Contantemente variados son los tiempos que tenemos, creo que el practicante de esta disciplina tiene mucho más que ningún otro, entrenada la adaptación a las circunstancias. Es relativamente sencillo entender que cuantas más pruebas se pongan, más habilidades hay que desarrollar. Agarres, distancias, disciplinas, cambios de intensidad, temperaturas y circunstancias, variables estratégicas y un sinfín de acciones que los que hacemos eventos podemos proponer a los atletas, haciendo que entrenen mucho más allá del físico, potenciando precisamente lo que hablamos, la habilidad de aceptar lo que venga y poner su máxima ante ello. Por eso es deporte de deportes.
    Lección clara y concreta, lo dijo Darwin. Sobrevivimos porque nos adaptamos
  • Jóvenes pero peleantes: seguimoshablando de adaptación. El problema es que el resto de deportes aún lo mira con recelo y mucha gente aún piensa que es una moda pasajera. Esto creo que viene dado por los motivos de siempre.A nivel empresa, aún está en proceso compradores tempranos (ósea que sigue siendo una oportunidad). A nivel social, pasa lo mismo que en las personas. Los deportes mayores que no tienen capacidad de observación, escucha activa y creen que lo saben todo, piensan que esta disciplina es una tendencia que no tiene recorrido. Solo aquellos que tengan ilusión por reinventarse y por ver que la sabia nueva les puede adelantar por la derecha sin que se den cuenta, entenderán lo que los jóvenes aportan y lo que se debe invertir en ellos.

Aquí hay un tema que creo debe remarcarse. El funcional fitness es un deporte adolescente aún no reconocido como deporte profesional. Pero esto ya empieza a cambiar y en breve será una realidad, casi por fuerza mayor, que se nos reconozca como comunidad que aviva la llama de la vida. De hecho, hay ya una organización a nivel internacional que se está encargando de aunar fuerzas para que esto suceda, y a la cual muestro todo mi apoyo (https://fedeff.es/)

Lección. Si los jóvenes vienen apretando, dales oportunidades. A ver si el CSD nos escucha

Sea como sea y tarde lo que tarde, esta disciplina nos va a dar mucho que hablar en breve, así que bienvenidos sean los nuevos deportes basados en las «cosas viejas» que siempre han funcionado: básicos y valores. Por muy joven que sea, sus cimientos son sólidos.
Por cierto, recordar de nuevo que el deporte genera salud, no la destruye

El deporte está a tiempo

Si las crisis y el hambre agudizan el ingenio,
necesitamos más crisis

No parece que hagan faltan muchas noticias más, ni que se presenten estudios venidos de las universidades de Wichita, Kandesburgo o Brandintong, para sacar una conclusión más o menos objetiva (al menos en España) de que el ambiente en la sociedad está enrarecido en términos generales. Diría incluso que casi por norma, todo esto que nos ha sucedido últimamente, nos tiene a todos algo más tensos y cabreados que habitualmente. Supongo que esto viene dado porque hemos perdido esa rutina que teníamos cuando éramos felices y no lo sabíamos, y en cierta medida, creo que también por la sensación de la falta de libertad que ahora gozamos.

Quede por delante que, aunque este blog se llame cultiva tu super héroe, me gustaría en este post hablar de lo habitual y lo cotidiano. De un día a día de personas comunes y corrientes como tu y como yo, de nuestros primos hermanos, de nuestros amigos y vecinos, y de toda esa gente que cada día se levanta intentando ser lo más feliz que pueda ser, dando lo mejor que sabe y haciendo lo posible por dejar su mundo mejor de cómo lo encontró.

El tema es que por mucho que tengamos cada día la oportunidad y el voto de confianza en ser nuestra dicha mejor versión, parece ser que “esta movida” que está ocurriendo y de la que poco a poco nos vamos levantando, no llega a irse del todo, y no parece se vaya a ir al menos a corto plazo.
El por qué, cada uno barre en su casa y sabe por qué está más cabreado, o más preocupado o más como le de la gana.
Hablaré de mi cabreo en este texto, así me desquito y puedo entrar en faena. 
Miedo, las personas tenemos miedo. Vemos demasiadas noticias en la tele, excesivas, hipócritas y poco optimistas. Creemos demasiado, o mejor dicho, hacemos mucho caso a los políticos, sobre todo a los que no son de nuestro bando, con el objetivo de criticarles y reventarlos por lo mal que lo hacen.
Por si no lo estás entendiendo, no estoy tirando de las orejas ni a los periodistas ni a los políticos, que por mucha mierda que nos ofrezcan, sólo venden lo que se consume. Te estoy regañando a ti, a mi, a nuestros amigos y a nuestros vecinos, porque estamos dentro y somos parte de esa sociedad que pertenece a un global que consume mierda cada día, y que está permitiendo que le dejen cabrearse. Peor aún, que se está creyendo una gran mentira que no tiene otro objetivo más que dejarnos quietos para que podamos ser cada vez menos autónomos y más maleables, dóciles e inseguros.
Hemos entrado en su juego y ahora somos igual que ellos, siendo mejores por lo mal que lo hace el otro, y no por lo capaces que somos de mejorar nuestras virtudes o corregir y aprender cuando erramos. ¿Somos una sociedad blanda? Aquí es donde la respuesta suele tener un, – por supuesto que sí, pero yo no tengo la culpa. ¿E aquí el error tal vez? ¿Tal vez necesitamos algo más de pasarlo mal para empezar a coger las riendas y no echar balones fuera?

Y ahora que ya me he quedado algo más a gusto dando mi opinión (mesurada y controlada para no herir sensibilidades), me encuentro en un proceso de reflexión profundo estas semanas, luchando a fuego contra mi mismo, con el deseo de eliminar un pensamiento que me azota sin parar y que ni por asomo me gustaría que se conviertiera en real. Por eso es por lo que me decido a escribir esto, por seguir buscando algo donde aferrarme para no sentir esta sensación, para buscar aire y luz en todos aquellos que se sientan responsables y partícipes del cambio en nuestro sector. Quiero eliminar este profundo sentimiento de pensar que, si los próximos juegos de Tokio se realizan en las fechas previstas, serán para España uno de los resultados más desastrosos que hayamos tenido nunca. No soy cristiano, pero rezo por no tener razón…

Mi teoría no tiene que ver con que el talento de los deportistas ni el de sus entornos, ni mucho menos. De hecho, creo que a largo plazo esto va a ser un motor de combustión brutal, que hará que la curva de éxito sea extraordinaria. El problema no es de los deportistas, es de todo este entorno, como decíamos antes, enrarecido. Un entorno que estamos construyendo entre todos, los que venden y los que compramos dicha basura.
Los chicos y chicas más laureados que nos representan en los juegos, suelen aspirar mínimo a diplomas olímpicos, el resto, suelen tantear por ser sus primeras experiencias. Esto nos da un resultado de unos 15 metales, algo más del doble en diplomas y una retahíla de deportistas que cumplen su sueño para poder seguir avanzando. Eso si todo hubiera sido como lo que estamos acostumbrados. El tema, es que nuestros deportistas de élite, aparte de haber entrenado en unas circunstancias diferentes e inusuales, viven su día a día con el lastre social que hemos creado (no vale pensar que los demás países están igual, porque eso seguirá siendo echar balones al otro lado, mirémonos el ombligo por favor).
Imaginemos y por un momento pongámonos en su piel, si a nosotros los mortales, todo esto nos está afectando dentro de nuestras rutinas, como estos artistas, que miden al milímetro cada acción que llevan a cabo, porque aquí si que cada paso cuenta, entrenan cada día con una mochila de noticias poco favorables. No se puede competir en alto rendimiento si tu propio equipo (tu país, en este caso España), está constantemente llorando y quejándose de lo mal que vamos, lo poco que mejoramos y lo fea que está la cosa, mientras no se ocupa de echar el resto por hacerlo mejor.

Si seguimos así, poca chicha. Pero, desde mi punto de vista, el deporte en general y el de España en particular, tiene una oportunidad única para reconducir estas malas vibras.

Primer ejercicio: revisar ego.

Si los demás hacen algo bien, ¿por qué no observarlo y mejorarlo? Me flipa el trabajo de la NBA, no sólo por el mensaje escrito en sus camisetas y lo que lleva intrínseco, si no por la sensación de colectivo que tienen, y de orgullo de pertenencia que genera en la sociedad. Estamos a tiempo de seguir creando mensajes de aliento y unidad.

Segundo ejercicio: moverse.

Cual padre a sus hijos o hijas, qué mensaje crees que inspira más, el de estate quieto que te puedes hacer daño, o el de observa bien para no caerte y si te caes, aprende para la siguiente. El primero, muy español, es protector pero limitante por la orden, el segundo, reflexivo y retador. ¿Demasiado centrados estamos ahora en el primero no crees? Qué tal, si pasamos a la acción y empezamos a proponer retos en nuestro ser y a los que nos rodean.

Tercer ejercicio: dejar de ser mejor que los demás por que los demás son peores

Juraría que ser el menos malo de los que hay, es seguir siendo malo. Creo que con el talento y el tiempo que tenemos por delante, ahora es tiempo de volver a los básicos más esenciales, esos que emergen dentro de nosotros y, sobre todo, que dependen de nosotros más que de otros. Si nos gusta ver protagonistas en las series y ponernos en su situación, ¿por qué no agarrar nuestra historia ahora más que nunca y protagonizarla sin depender de los demás?

Cuarto ejercicio: ¿Cómo te puedo ayudar? ¿Qué puedo hacer por ti?

No es sólo un ejercicio de empatía, es algo más. Es salir de ti para compartir con esos a los que les haces la pregunta. Es ser parte de lo que construyen los otros, es permitirte estar al servicio de alguien. Es retorno emocional, impagable.
Ni que decir tiene, que si estás leyendo esto, te estoy haciendo las preguntas directamente.

Lo bueno de todo es que el deporte tiene mucho que decir en estos ejercicios, y es por eso que tiene una oportunidad de seguir construyendo de forma masiva el mensaje y expandiendo sus bondades. Capaz de unir comunidades, de sacar a la gente de casa para poder mirar más claro y de hacer sanar cualquier estado corporal, físico y mental.

Esta crisis ya nos ha mostrado una parte, ahora depende de nosotros afrontarla de forma que los que nos preceden, vean que somos gente dispuesta a vivir intensamente afrontando cada reto que nos venga por delante.

Sigamos construyendo mensaje!!!
A la crisis y al miedo, deporte…

La sociedad ya no sabe sentarse bien

Qué bien se está cuando se está bien

 

imagen sentarse bien.png

Contéstame a una pregunta. ¿Cuántas veces oíste a tu madre, a tu padre, a tus abuelos, a tus profes, a tu director del cole decirte “¡siéntate bien!”?

Estoy leyendo sentado en el banco de un parque de Valencia, a plena luz del día y con el sol resplandeciente de septiembre que nos brinda esta maravillosa ciudad, un libro muy potente, tan ágil y breve que sientes la necesidad de acabarlo ya porque ves que queda poco. Desde el inicio te engancha por sentirte en el papel del protagonista.
De repente oigo una voz femenina que viene del otro lado del parque, que rompe la aventura  silenciosa que estoy compartiendo con el protagonista de la historia del viaje del equilibrista¡Te he dicho que te sientes bien! – Le dice la que intuyo que es la madre del niño que recibía el grito.

Pasan los minutos y me hago consciente que hace rato que no estoy atendiendo a la historia del libro, y que la fluidez de mis pensamientos se ha dispersado hacia la reflexión de cuánto durará el grito que ha impuesto la madre dentro de la cabeza del niño, y durante cuánto tiempo aplicará la orden en el futuro.

Por otra parte, casi puedo intuir (como si me hubiera metido en tu cabeza a través de la cámara del terminal donde estás leyendo esto) que al leer esto tu mente ha chequeado como está tu postura. ¿Era correcta antes de leerme?

Voy a echar piedras a mí tejado para ver si puedo sacar un piso más hacia arriba una vez las ordene. Si la sociedad se sentara bien, muchos entrenadores, sobre todo los personales, perderíamos bastante curro.
Esta sociedad,  cada vez más inquieta, se sabe de sobra la teoría, y aunque quiere siempre más y eso es bueno para el sector, prefiere dirigir su mente al consumo desmesurado de información. A la gran mayoría, la teoría se la trae floja y considera que es menos importante que cubrir la agenda de cosas y apagar fuegos, hasta el punto de sentir que no llega a todo porque el día solo tiene 24 horas.
Tal vez estemos en un punto en el que el exceso de info empiece a estar mal gestionada, o mejor dicho, inicialmente mal entendida. Sabemos la teoría, pero no practicamos.
Sentarse bien no es una orden impuesta, es una necesidad básica que deberíamos hacer entender a cualquiera de los que vienen después y serán el futuro. Lo malo es que no pregonamos con el ejemplo todo lo que deberíamos.

Creo que dar órdenes, sobre todo en etapas y edades de aprendizaje, son necesarias y funcionan de verdad cuando todos los jugadores (padres, profesores, educadores, etc) comunican dentro de sus posibilidades, las cosas de forma coherente y entendible. El problema está en que los mismos adultos que dan la orden, se convierten en maestros de la palabra y no del ejemplo.
Algo mal estamos haciendo a nivel colectivo cuando dichas órdenes no cuajan, y vamos con el YO por delante, pero a la vez nos estamos convirtiendo en personas inseguras que justifican el fallo sin asumir el “mea culpa”. Algo mal estamos haciendo cuando decimos que la culpa es de la política y no hacemos mucho por mejorar la sociedad. Algo mal estamos haciendo, cuando vemos y oímos a periodistas en horas donde hay niños, generar discordias que atacan a otros sin argumentos de peso, solo porque saben que consumimos el morbo. Algo mal estamos haciendo, cuando las urgencias de los hospitales se llenan, hasta que llega la hora de cenar o hay partido. Algo mal estamos haciendo, cuando la buena acción del día se convierte en tirar a la basura un plástico que había en el suelo…

Por cambiar de tema y hablar algo de deporte, llevamos ya unos años observando una tendencia demasiado alcista de gente que, pese a no ser deportista de élite, tiene lesiones similares a estos. El por qué. Estrés. Las lesiones pueden ser por dos tipos. Traumáticas por impacto, o traumáticas por reiteración (movimientos funcionales, emociones negativas repetitivas, falta de nutrición/hidratación. Todo = a estrés). Las de impacto, evitables a nivel técnico si se atiende a hacer/practicar desde el conocimiento, e inevitables desde el punto de vista del golpe. La de reiteración, vienen de los vicios que adquirimos y del orgullo de pensar que hacemos todo bien.

La reflexión que me sale, es si la gente se lesionaría tanto si aplicase los básicos. Sentarse bien, estar bien hidratados y nutridos, descansar de forma coherente, quererse a sí mismos con retos y motivación de una actitud alegre y optimista, cultivar cuerpo y mente, y tener una vida social activa. A parte de saber respirar, creo que son conceptos que todos sabemos del bien que nos reportan, pero la gran mayoría del tiempo omitimos y no los tenemos en cuneta.

Sentarse bien implica estar atento, estar pendiente a tu postura y con ello ser tú mismo, pero correcto, bien puesto. Es hacerse consciente de cuándo y dónde estás, porque no es una cuestión de hacer cosas para llegar al éxito, sino de cómo llegar hasta él. Es proyectar presencia, mientras alteramos nuestra propia química interna. Es conectar con nuestros músculos menos queridos   y que maltratamos de forma inconsciente.
Sentarse bien es un pequeño detalle, que puede marcar una gran diferencia a la hora de mostrarte que puedes, con pasos minúsculos que apenas notes, conseguir ser dueño de mucho más que tu agenda.
Tal vez podríamos convertir este simple acto, en un elemento transgresor que reenfoque la cultura general, y con ello hacernos conscientes que para que haya cambios debemos empezar por algo que sea fácil de conseguir en nuestro día a día.

Gracias a esta madre y “el mensaje de cariño” a su hijo, hemos podido empezar con este tip en la nueva sección de plaza radio “Actívate” donde colaboraré este año (minuto 39).
Intentemos desde nuestro universo y posibilidades, dejar esto mejor.
Aquí os dejo un vídeo de un milenial muy preparado para la vida, que se ha hecho consciente de esto, y está intentando cambiar el mundo, no sólo con lo que sabe hacer, sino con lo que sabe que es capaz de conseguir desde su poder de influencia. Más Rickys, menos gente mal sentada.

Currículum post mortem

Que la tinta que mancha tus dedos sea la resaca de haber escrito algo eterno

Vivimos tiempos de cambio frenético, donde apenas da tiempo a pararse a reflexionar sobre las cosas que ocurren en el día a día. Tiempos donde todo el mundo parece estar centrado en buscar el equilibrio entre la velocidad y la paz interior. Tiempos donde parece que sacar y regalarse un rato para uno mismo es tirar dicho tiempo a la basura. Agendas que no abarcan entre sus casillas todo lo que hay que hacer, y bloqueos mentales (mas de la cuenta) por pensar en todo lo que tenemos por acabar.
Tal vez es nuestro ego el que está tratando de coger el mando, sólo por no sentirse atrás de lo que vende el resto…

Este es un blog de emprender en deporte, pero hoy, he decidido escribir lo que sería mi epitafio, empujado literalmente por un encuentro fortuito casual de 45 minutos con dos personas que, hace menos de 48 horas eran unos desconocidos, y ahora no se si haría cualquier cosa sin contar con su opinión. Personas del 2,25%, con un reto de esos que merece la pena ser contado.

amador.png

Amador, un deportista que quiere subir el Himalaya entre otros retos,  y Ofelia, una mujer de armas tomar, que busca dejar esto un poco mejor de lo que está. Mejor ver sus historias para entender mucho más, dado que reitero que merece ser contado.

34 vueltas y media, o alguna más le he dado a la charla, tras la petición de Ofelia en la conversación de que le enviase el CV para presentarme a otras personas.
Lo malo ¡nunca he hecho un currículum! Lo bueno – Escribe lo que quieres que se recuerde de ti. Tu misión, por qué has venido a esta vida, el legado que dejarás, lo que pondrá en tu lápida el día que te vayas, y eso es lo que yo presentaré – Esas fueron sus palabras, y así voy a proceder, porque creo que tiene más sustancia que crear un CV, y sinceramente me pone mas!

Tengo que confesar que me da mucha vergüenza hablar de mí mismo, pero qué coño, al lío!!

Iván Colmenarejo, un tío normal que quiso sonreírle fuerte a la vida, y que fue elegido por el deporte para hacer que la gente se encontrase mejor en la vida. Amante de la diversión continua y optimista pragmático que confiaba en el talento del ser y en la naturaleza de lo humano. Mostró respeto a su frase motor, un día vivido un sueño cumplido, y cumplió con sus sueños trabajándolos cada día.
Según su gente, guerrero de luz. Según él, aprendiz de la vida, que pensaba que la educación no dependía de titulaciones, y si de la pasión y la constancia en usar el músculo más importante que tenemos, la curiosidad.
Su reto, dejar este mundo mejor, usando el deporte como llave del cambio. Recorrió el mundo llevando su mensaje, para conocerse más a si mismo a través del aprendizaje de los pasos de su propio camino, dejando a cientos de amigos por el camino, incrementando en cada experiencia a su familia.

Disfrute en paz
—–

Ha sido tremendo escribir esto, igual de tremendo que conocer gente por el camino como ellos. Agradecido eternamente a la vida por encontrar gente con tanto alma. Sigamos caminando, solamente para encontrar gente tremenda!

https://www.youtube.com/watch?v=eBeFjYVFwcY

Tu también duermes poco, a que si…!!

Si no lo intento, no puedo medir
Si no puedo medir, no puedo analizar
Si no puedo analizar, no puedo pivotar
Si no puedo pivotar, no hay mejora

oceano rojo.jpg
En la imagen Javier Echaleku saltando de su sofá rojo

Resuenan como campanas en mi cabeza las palabras de mi gran amigo David Blay cada vez que veo que no llego a tiempo en una entrega, o cuando me agobio por no ser capaz de desconectar la cabeza ni un segundo, cuando no hace falta estar en modo on. –«Algo mal estás haciendo querido amigo, cuando sabes que las mejores cosas que has hecho, te han venido estando relajado y en proceso de desconexión»- Cuánta razón tiene, y qué poco caso le hago.
Está claro que una persona capaz de hablar como él lo hace de conciliación, debe dominar este arte de ser productivo justo las horas que él decide serlo, y supongo que sólo es cuestión, como todo, de entrenar.

En la otra parte, estamos «los otros». Los que no llegamos. Los ultra estimulados. Los que sentimos hormigueos al mirar el móvil en un día de descanso, y al ver que no hay notificaciones de whatsapp, ni mails, pensamos que se ha caído la red, y con ella nuestro mundo. Los «incomprendidos» que pensamos que el mundo empieza a aburrirse de nosotros por tener sólo un tema del que hablar.

Malbendita locura el arte de no tener tiempo, y que envidia sana de gigantes como David que se hacen conscientes de cómo ser felices mas tiempo.

Cuento esto, porque hace unas semanas, un grupo de 8 tarados, a cuál de ellos más, nos hemos juntado para crear un evento, Mediterranean  Sport Sunmmet, con el objetivo de traer a Valencia un evento que complemente y casi complete la oferta del sector en la ciudad, donde tod@s l@s involucrados de este tengan  un sitio donde poder compartir y contrastar acerca de sus inquietudes.
8 tarados que están claramente en el grupo de «los otros». Con tiempo suficiente para no tenerlo, y el toque de locura que tienen los de ese grupo para pensar que en 100 días, si aportan un poquito de lo que son, se puede conseguir hacer algo que pocos han hecho.

Entre el deber de querer hacer esto, y el sentir de la incertidumbre del conseguirlo, está la constancia y el conocimiento de todos. Y sobre todo la curiosidad.
Contaré mi caso. Gracias a esta curiosidad por hacer algo así, he buscado como ampliar mi conocimiento en menor tiempo, y he encontrado algo (o tal vez me han encontrado ellos a mí…) que, no sólo me está haciendo ver con claridad que podemos hacer algo grande, si no que hay muchos «otros» cometiendo las mismas insensateces. Esto que se ha cruzado en mi búsqueda y garantizado que ha llegado para quedarse en mi vida, se llama The PowerMBA, que en resumidas cuentas, es un máster online que te hace sentir como si todo el conocimiento de de los mayores expertos del mundo viniera a tu casa a tomarse un café contigo.

Ayer, primer networking, y 21 amigos  más que agregar a la agenda en el grupo de «los otros» (…curioso que también había gente como David, dios que envidia!). Una experiencia brutal para fanáticos del emprendimiento, que ha hecho que de por pagado el precio que vale.

Comida con gente de tu «rollo», y dinámica de grupo con ponencias de esas que te hacen sentir un comprendido más. Aprendizaje y diversión (cayeron unas cuantas cervezas) unidos de la mano, y un sin fin de términos que hacen que no sientas la famosa y poco nombrada soledad del emprender.

Frases compartidas como, tu también duermes poco verdad…  sólo quiero bajar el ruido que suena dentro de mi cabeza… lo hago para hacer a la gente feliz… o hago meditación o micro-siestas en el baño. Lo dicho, bendita locura el poder encontrar gente con la que compartir desfachateces como estas.

Me he dado cuenta que para eso está el networking,  para encontrar a esos otros locos que crean en ellos mismos y confíen que son capaces de cambiar las reglas, para compartir con unos cuantos tarados algo en lo que te sientes identificado y al menos, sentirte mejor, para descubrir cosas espectaculares de otros mientras te descubres a ti mismo.

Es bonito ver como los océanos rojos están llenos de  valientes capaces de bracear hasta los deseados azules, creando arcoíris en las almas de todos aquellos que disfrutan desde fuera las travesías, y  que parecían imposibles antes de que los “locos” se tirasen al agua.

oceano azul.jpeg

Lástima que la mayoría de las veces, por no decir todas, no haya tiempo para hacer mas. Mas, para hacer de esas mil cosas que pasan cada día y que a corto plazo parecen disiparse como el humo de un cigarro, grandes momentos imborrables en el largo plazo. Porque por mucho que se sufra a corto plazo, dentro de 5 años, serán grandes momentos.

El tiempo apremia, así que sigamos teniendo claro a quién elegimos en nuestras travesías, y cómo vivirlo

https://www.youtube.com/watch?v=y_5-5FFBg9c